Pero los Tigres vendieron cara su derrota, luego de que en el primero y tercero de la serie pactada a siete lograron una cómoda ventaja de once carreras a seis, crédito para Iván Juzacamea, quien ligó victoria en esta gran final y de hecho fue el único que pudo vencer a los Cubs.
Se crecieron los felinos y le dieron palos a su estelar lanzador Julio Valdez, a quien cargaron con la derrota.
Lupe Saavedra, Iván Rodríguez y Alonso Arreola conectaron cuadrangulares sobre lanzamientos de Julio Valdez y fueron el ariete ofensivo de los Tigres. Saavedra conectó tres hits en cuatro viajes al plato y produjo el mismo número de carreras, Iván Rodríguez le sonó al cuero de 3-2 con uno para la calle y tres producidas, Arreola con 5-2 y una producida.
Por los Cachorros Miguel Angulo le dijo que no a esa pelota en dos ocasiones, produjo tres y al bate en general de 4-3, en una casa perdida para los Cachorros.
Por la tarde, el mismo Miguel Angulo con panorámico tablazo de cuatro estaciones le dio prácticamente el pase a la gran final a los cachorros, aunque en forma extraoficial se supo que el marcador de tres carreras a dos se decidió por un wild pitch.
El mismo Miguel Angulo fue el pitcher ganador y perdió Jesús Soberanes.
A punto estuvieron los de Cruz de Piedra de hacer la hombrada de sacar par de victorias de Mi Patria y obligar a un séptimo partido, pero todo quedó en buenas intenciones.