Irma, de 39 años de edad, con residencia en uno de los ejidos pertenecientes a Empalme, informó que ante el comportamiento de su pareja decidió seguirlo, siendo de esa manera como se dio cuenta lo que pasaba.
Agregó que acompañada de sus dos hijos, menores de edad, llegó a la terminal de los caminos que cubren la ruta del valle, y caminaron por las diferentes calles del primer cuadro de la ciudad.
Se logró saber que el esposo tenía dos semanas de haber salido de su casa, después de sostener una discusión y estar a punto de ser agredida físicamente, cosa que no ocurrió ante la intervención de unos vecinos.
Fue una vecina la que le dijo que Marcial, de 44 años de edad, se encontraba a espaldas de los baños del Mercado Municipal, al llegar lo encontró con una mujer y al reclamarle le gritó palabras altisonantes.
La dama dándose valor le dijo que no interesaba lo que andaba haciendo, pero le solicitó la manutención de sus hijos, al seguir con actitud agresiva se retiró, diciendo a su vecina que acudiría a Seguridad Pública para que lo detuvieran y en caso de pasarle algo malo lo señalaba a él como responsable.