Entre los 11 y los 17 años, José Armando acumuló cien resguardos en celdas especiales del Centro de Detención Municipal.
La última fue canalizado al Itama donde permaneció un año hasta cumplir su mayoría de edad para salir y ser detenido a la semana de llegar a Guaymas.
Conocido como “El Calamarcito”, residente del sector Yucatán, permaneció unos meses en el Cereso de Guaymas y esta semana fue detenido por falta administrativa cuando unos vecinos del centro lo denunciaron.
Estuvo 36 horas de arresto y quedó en libertad.