La disposición emanó del propio presidente Andrés Manuel López Obrador a fin de evitar que dichos organismos que fueron promotores de la internación de vehículos de procedencia extranjera a nuestro país, en contubernio con funcionarios corruptos en aduanas, sigan haciendo su agosto con los trámites que no tendrán costo alguno.
Los requisitos para regularizar una unidad son dos copias del título de propiedad, credencial de elector, licencia vigente, así como comprobante de la póliza de seguro por daños a terceros, pago de dos mil 500 pesos por unidad, modelos 2016 y anteriores.
En primera instancia, se procederá a la legalización de vehículos en los estados fronterizos y enseguida a todo el país, estimándose el comienzo en los primeros días del mes de noviembre próximo.
Solo en la región Guaymas y Empalme, se consideran a obtener sus documentos alrededor de doce mil vehículos, de acuerdo al padrón de los propios organismos “Pafas”.
Además, el Gobierno Federal dispuso el cierre de las fronteras a la internación de más vehículos del vecino país a suelo mexicano, por personas que se dedican de tiempo completo a esa ilícita actividad, en respuestas a las demandas de las armadoras de vehículos de México, ante el temor de ser desplazados en su mercado.
El proceso se dará, en el marco de la lucha contra la delincuencia organizada, pues siete de cada diez actos delictivos se cometen en este tipo de unidades que son imposibles de identificar, precisamente por carecer de documentos.
El costo total de legalización dependerá de las entidades, pues tendrán que ser emplacados y otras cuestiones inherentes a las Agencias Fiscales de cada municipio.