El temor a represalias, es la causa por la que varias familias que participaban en la búsqueda de personas desaparecidas abandonaran en todos los sentidos al colectivo Guerreras Buscadoras de Sonora.
Lo anterior, lo expresó la líder del colectivo de Guerreras Buscadoras de Sonora, Cinthya Maritza Gutiérrez Medina, luego de que en la última colecta que realizaron en días pasados, no tuvieran el apoyo que esperaban, sobre todo, porque en Guaymas, Empalme y los Valles, se tiene un registro de al menos 600 personas reportadas como desaparecidas.
“No tuvimos el apoyo que esperábamos por parte de todas las familias que están sufriendo la pérdida de un ser querido, sin embargo, a aquellos que sí ayudarnos se les agradece”, expresó la líder.
Todo el recurso que se obtiene, aseguró, es destinado a la labor de búsqueda; en tanto invitó a la población en general a participar de una forma u otra, con aportaciones económicas que se utilizan para el abastecimiento de combustible, adquisición de equipo de trabajo y víveres para las personas que realizan las labores.
“No podemos parar con esto, tenemos que continuar con las búsquedas, porque los desaparecidos son de todos y si nosotros no los buscamos, nadie más los va a buscar”, aludió.
Reveló que esta situación de abandono que están padeciendo, se derivó después de que la compañera Aranza, fuese privada de la vida, sobre todo, en estos tiempos en los que reveló, son las mujeres las principales víctimas de desaparición.

Incrementan estadísticas de mujeres desaparecidas
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