La única diferencia entre el Juego de Estrellas de la Liga Ejidal de Beisbol de San José de Guaymas, entre el del año pasado y el que se llevó a cabo el reciente domingo, fue el tremendo calorón, pues en el terreno, la Selección Sur repitió color sobre su similar del norte.
Por algo y por mucho, le llaman la Liga del Soplete, pero como que salió el clima en esta ocasión, para agradar a los cientos de aficionados que desde temprana hora se dieron cita para dar inicio con unas tardías pruebas de campo.
La gente del Sur asestó una paliza de padre y señor nuestro, pero aparte, hizo valer su pitcheo, con una soberbia y magistral actuación desde la loma de las responsabilidades por parte de Jesús “Bolita” Súichilt.
Si autoridades de ninguna especie, que solo acuden para tomarse la foto, comprometerse con obras que nunca cumplen, se dio la presentación de los jugadores, alineando por el lado de tercera los del norte y el sur, por la raya de primera, en un gran ambiente impuesto por el cronista Freddy Blanco y la maestra de ceremonias, Julia Peraza Pineda.
Previo, se hizo recordatorio y merecido homenaje a la memoria de Ernesto López Lerma, quien dejara huella imborrable en nuestro beisbol, reconocimiento que les fue entregado a su señor padre, Bulmaro López Amaya, y a su tío Joel.
Detrás de la barda y por los márgenes de los jardines e izquierdo, la gran afición, manteniéndose sobre la carretera, alrededor del jito, ilustres veteranos de la pelota guaymense, como Ramón Santos Romo Navarro, el mundialista José Luis Cadena Domínguez, Arturo Hugo Moreno, el inmortal del beisbol sonorense Federico “Lico” Evans, Cosme Gutiérrez y una pléyade de ilustres Máster y Súper Máster.
La Selección al frente de Layón Orantes, apoyado por su coach Cayetano Márquez, repitió la dosis al norte, aunque estos respondieron llevándose todas las pruebas de campo.