Siendo tan joven e inexperto quiso enfrentarse a los mejores y más temidos campeones de su época.
Enfrentó a los mejores y los hizo pedazos sin dejar dudas.
Enfrentó y arroyo a 3 salones de la fama sin dejar dudas.
Enfrentó al mejor boxeador de Puerto Rico de todos los tiempos y lo hizo pedazos, fue amenazado de ser noqueado en 8 asaltos por el boricua y Salvador le regresó la moneda, lo castigó durante 8 asaltos para después noquearlo salvajemente en honor a su orgullo y a su querido México.
Enfrentó al mejor boxeador africano de la historia y le pasó por encima dándole un KO y una paliza, golpiza que nunca olvidó el gran Azuman Nelson y que en la muerte de Salvador el africano viajaría desde su continente hasta México para despedir con lágrimas al gran Salvador Sánchez.
Fue por primera vez a pelear por su primer campeonato ante el gran campeón "Coloradito” López, lo venció, le dio revancha y lo volvió a vencer y no solo lo venció, sino que le dio una paliza en las 2 peleas, y en las 2 peleas lo puso de cara a las lámparas.
Peleaba a 15 rounds y nunca se le vio cansado ni con la boca abierta.
Entrenaba para pelear a 20 rounds sin importar el rival.
Nunca escogió rivales.
Nunca le sacó la vuelta a nadie.
Nunca hizo pesos pactados Fue nombrado el #1 libra por libra por la revista "the ring" junto con Sugar Ray Leonard.
Hizo defensas de título mundial ante:
Rubén Castillo - UD 15.
Danny "Coloradito" López - KO 14.
Patrick Ford - MD 15.
Juan Laporte - UD 15.
Roberto Castañón - TKO 10.
Wilfredo Gómez - TKO 8.
Pat Cowdell - SD 15.
Jorge García - UD 15.
Azumah Nelson - TKO 15.
A sus 23 años Salvador Sánchez ya tenía 10 defensas de su cetro mundial pluma.
Salvador Sánchez se encuentra entre los 3 mejores pesos pluma de la historia.
En puerto rico lo tienen como el más grande de todos los tiempos.
Salvador Sánchez fue el boxeador favorito de Roy Jones, Terry Norris y varios más.
Antes de morir pidió subir de división para ir a enfrentar al boxeador más grande que ha dado Nicaragua, la leyenda de Alexis Arguello, combate que ya se empezaba a cocinar con "dudas" porque Arguello declaró que aún no se sentía en condiciones para enfrentar y defender su título ante el mexicano Sal Sánchez, esto por motivos de dolor en una de sus rodillas, y que respetaba mucho a Salvador.
Con solo 23 años fueron suficientes para lograr ser parte del salón de la fama, impresionante.
Salvador Sánchez fue un boxeador demasiado humilde, nunca habló de más, saludaba a todo el mundo, con todos reía y platicaba, hablaba solo en el ring.
Todo esto y muchas cosas más. Hoy, a 40 años del trágico accidente automovilístico donde perdió la vida, en plena juventud.