Este último recibió siete anotaciones en contra y solo pudo reaccionar con un gol a favor, por lo que Atlante se lleva el partido y también los tres puntos.
Julio Cebreros dio un partidazo y marcó en dos ocasiones. Un cabezazo desde el manchón penal puso a su equipo arriba en el luminoso apenas al minuto cinco.
Más tarde, al minuto quince, Cebreros saca un tremendo disparo de pierna izquierda que coloca al fondo de la red, consiguiendo su doblete en el partido y demostrando que está para tomarlo en cuenta, darle más minutos en el equipo, ya que por lo general entra de recambio.
Alexis Gurrola fue otro de los jugadores que marcó gol, al minuto 23, en una jugada por la banda de la izquierda donde mandan un centro pasado al segundo poste y Alexis lo intercepta con la cabeza, mandando la pelota al fondo de la red y colocando el tercero para Atlante.
Daniel Duarte fue el encargado de marcar el cuarto gol, tras un disparo de pierna derecha que incrustó en el ángulo de la portería rival dejando sin nada que hacer al equipo de Pachuca.
Jesús López hizo el quinto gol en un tiro de esquina, después de una serie de rebotes donde López bajó el esférico y consiguió marcar para su equipo.
Obed Rubio también se hizo presente en el marcador marcando un golazo de volea, sin pensarlo, tras un centro por la banda de la derecha Obed se quedó parado esperando a que cayera y antes que lo hiciera prendió el esférico y lo puso al ángulo de la portería.
Jorge Beltrán se encargó de marcar el único gol del equipo de Pachuca y con eso, por lo menos, hicieron el famoso gol de la honra, demostrando que el futbol es así, que a veces se gana y a veces se pierde, pero el seguir peleando hasta la final forja jugadores con carácter, la calidad se trabaja en los entrenamientos y el carácter se forja en el terreno de juego, en los partidos difíciles.