Una vez más usuarios del transporte suburbano con corrida a las comunidades rurales se quejaron del servicio que se les brinda, especialmente los camiones “verdes”, como les llaman, de Transportes Barret.
Los quejosos aseguran que es muy deficiente, aparte que reciben muy malos tratos de los operadores y de los propios concesionarios, a quienes trataron de déspotas y prepotentes.
Hicieron un llamado a las autoridades de transporte para que los “metan en cintura”, y los obliguen a prestar un servicio, si no de calidad, al menos que sea mejor, porque según tanto operadores como el concesionario, dijeron estar enganchados y muy influyentes.
Acusaron que los operadores se dirigen de manera muy grosera y descortés para con los usuarios, ejemplo que les pone el propio concesionario de los camiones, quien frecuentemente aborda las unidades para cobrar o verificar que sus choferes no le roben.
En ocasiones, agregaron los denunciantes, hasta porque le falta un peso a un usuario no lo dejan abordar la unidad, “pero bien que no quieren dar boleto, aun cuando es el seguro del viajero”, es obligación que los den, porque en veces meten camiones que parecen chatarra y exponen a los usuarios.
Y peor aún, exceden la capacidad de la unidad y permiten que vayan muchos pasajeros de pie, como “sardinas”, lo que les pone en verdadero riesgo.