Una grúa se instaló en la parte central del crucero para sacar rieles de la vía principal, lográndose saber que no estaban asegurados con las placas y clavos que en su momento pudieran haber generado descarrilamiento.
Fueron algunos tramos de rieles los que se utilizaron para cambiar a los que se encontraban en mal estado, esto generó que la circulación vehicular se suspendiera de oriente a poniente y viceversa.
Debido a esto, los usuarios de camiones que cubren la ruta Guaymas-Empalme fueron afectados, ya que las unidades eran transitadas por el puente elevado del sector Kilómetro Dos.
En cuanto a las llamadas rutas del servicio urbano tuvieron que regresarse por el bulevar Ramos Flores hasta llegar a la avenida 5 de Mayo para circular de norte a sur y de sur a norte, por la calle Ignacio Zaragoza.
Otro de los problemas que tuvieron los conductores de vehículos fue cuando llegaban a la calle Ignacio Ramírez y avenida Revolución, ya que estaba inundada, debido a un problema en el tubo principal de agua potable.