En el Taller de Grabado de la Licenciatura de Artes Plásticas, no solo se crean obras en diferentes texturas; se tiene, además, la posibilidad de reproducirlas, por lo que quienes tienen acceso a él pueden echar a volar su imaginación sobre madera, metal y otros lienzos.
El docente Noé Corral destacó que los estudiantes allí conocen técnicas y la teoría de las artes gráficas, trabajan con linografía, serigrafía, punta seca y agua fuerte; técnicas de grabado sobre linóleo, sobre madera y sobre metal.
Consideró que el taller es un espacio que en el que orientan al alumno a esa posibilidad que tienen de reproducir sus imágenes y puede comerciar con ellas o difundir su obra
“Metal grabado sobre lámina negra (hierro común), lo graban con soluciones salinas, se usan ácidos normalmente. Aquí aprenden distintas técnicas y conocen la naturaleza de varios materiales en virtud de desarrollar imágenes que ofrezcan distintas texturas, distintos tratamientos; cada tipo de impresión aporta a la imagen una naturaleza única, un color o una textura, una manera, o lo que más impacta aquí es la posibilidad de la reproducción de las imágenes que sacan”, explicó el académico.

Espacio seguro

Noé Corral comentó que normalmente el grabado se maneja en ácidos, pero en el taller utilizan aguas salinas y cuenta con un cuarto de seguridad, extractores y dispensadores de residuos especiales.
“En el taller encuentras metal, tórculo, área de impresión, área de trabajo y área de seguridad; el área de trabajo general, las prensas o tórculos, área de pintado, tarjas, un rack para todas las impresiones”, detalló el también artista.
El Taller de Grabado, dijo, proporciona un servicio a la comunidad universitaria y a la Licenciatura en Artes Plásticas para los estudiantes de las materias de Técnicas y Teoría de las Artes Gráficas 1 y 2.