Para contextualizar, la obra llega en un año en el que las denuncias por maltrato animal se dispararon de manera alarmante con casos de agresiones a perros, omisión de cuidados y, lo más reciente, el envenenamiento y mortandad en fraccionamientos de Guaymas norte y el centro.

Tan solo este mes, van tres casos de canes que aparecen sin vida luego de ingerir alimento que les provoca intoxicación, ataques que se registraron en zonas donde el problema de perros en la calle es mayor, pareciera que hay gente que decidió exterminar animales como una solución al abandono y descuido de dueños de perros.

Así de grave es la situación en un municipio que tiene un mal registro por casos de Rickettsia y a eso se le suman las lesiones sufridas por personas mordidas por caninos.

Sobre esa realidad llega el proyecto para la construcción de un centro para perros con una inversión de 8 millones de pesos provenientes del Fondo Municipal, a ejercerse en un espacio del norte de la ciudad pero para servicio de toda la comunidad y la verdad, de concretarse, marcaría un antes y un después en cuanto a problemas de salubridad porque vendrá a dar refugio a mascotas abandonadas que serán vacunadas y atendidas, a la par de promover adopción responsable y conocer de todos los casos de maltrato animal que requieren investigación y sanciones.

Si la doctora cumple con ese propósito, estará construyendo una de sus mejores obras porque representa desarrollo bajo un criterio animalista y también significa atención a temas de salud pública complicados por gente inconsciente que deja a sus mascotas en la calle para generar riesgo y mortandad animal.