Este ciclo escolar no se logró cumplir con el compromiso con una calificación de excelencia, aunque al distribuirse el 70 por ciento de las prendas la mayoría de los estudiantes están conformes por recibir artículos adecuados a su edad, talla y de calidad aceptable.

Por ser un programa de gobierno sobresalen los casos de inconformidad y la desorganización que se percibió esta semana en los módulos de la Canaco en los cuales hubo padres y madres de familia esperando durante varias horas sin obtener los uniformes porque se agotaron los lotes o problemas en el sistema.

La inquietud recurrente fue la de la mala calidad en el calzado para lo cual la SEC informó del proceso de cambio de prendas defectuosas en los módulos habilitados en Guaymas, puerto en el que se ha atendido a tres personas con calzado roto.

La devolución fue a cuenta de garantía porque para la gente el uniforme es gratuito, pero no para el gobierno que adquirió los lotes con un valor de casi 500 millones de pesos, de ahí que se pudo hacer el reclamo sin mayores problemas lo que habla de la buena voluntad del gobierno además del acto de conciencia de aceptar cuando hay inconvenientes que se han resuelto en todos los casos.

En conclusión, la inversión fue noble para ayudar a familias que no tienen recursos para comprar prendas oficiales, ahora habrá que esperar a que el gobierno termine el proceso de distribución para que corrijan todos los detalles que surgieron en los municipios confiando en que el siguiente ciclo escolar será mejor.