Ya con la categoría registrada en la Federación, pasaron tres años más para que llegaran los primeros recursos del fondo metropolitano destinado a los municipios unidos por actividades productivas pero el beneficio ni se sintió por el criterio irregular en el destino de 50 millones de pesos. Esa fue la inversión durante el trienio de Sara Valle y Francisco Genesta, cuya capacidad de gestión fue nula y mala, tanto como para perder la oportunidad de promover obras ante el comité estatal para la asignación de ese fondo y el resultado lo conocemos todos. Los del comité autorizaron que el presupuesto considerado para Guaymas y Empalme se ejerciera en la última etapa de la obra denominada puente metropolitano que no fue otra cosa más que un costoso recarpeteo de mala calidad y opacidad en el proyecto. Así se fueron millones de pesos y con ellos la posibilidad de hacer obras relevantes para el desarrollo de la zona conurbada en la que los servicios son pésimos y requieren de inversión inmediata por la gravedad de los problemas. Ahora que gobierna Morena parece que por fin los Ayuntamientos se pondrán de acuerdo en torno a proyectos necesarios en la región como el relleno sanitario conurbado que se contempla construir en una zona estratégica entre Guaymas y Empalme, con lo que se resolvería el desastre ambiental que representa el basurón de Maytorena además de reducir el costo de operaciones del relleno que se encuentra en Guaymas. Hay otras prioridades como la reparación del drenaje en las dos ciudades o el alumbrado público, por lo pronto ya se ha dado un paso en la búsqueda de recursos para los dos municipios que más que nunca deben estar unidos en el objetivo de atraer obras de calidad que traigan desarrollo a la región.