Las necesidades de nuevos espacios para la reubicación de varias dependencias del Ayuntamiento de Guaymas, las cuales provocan fuertes gastos por concepto de renta a particulares, se podrían solventar con la enajenación de predios baldíos y edificios que no generan un peso a las arcas del Gobierno Municipal, pero resultan una carga onerosa, por la obligación de los servicios que por obligación se les tienen que prestar.Marina Sinclair, que sería el orgullo del gobierno de Felipe Calderón Hinojosa, resulta “un elefante blanco” al que hay que dar atención por parte del Ayuntamiento de Guaymas, destacó la Agrupación Guaymas, Tu Puerto y cuyo “elefante blanco” puede ser aprovechado para la instalación de varias dependencias municipales como la Casa de la Cultura, que desde hace unos 30 años están en condición de renta para la Comuna.
Sinclair es uno de tantas marinas que creó el gobierno descrito, a través del Fondo Nacional para las Actividades Turísticas (Fonatur), y que resultaron un fracaso y el paquete incluiría el terreno donde operó el cine Tarraza Guaymas, la oficina Federal de Hacienda y diversas oficinas.
Aquí, el Gobierno Federal tiene las facultades de exigir la devolución del predio, pues no se le dio la utilidad requerida en su tiempo y resultaría un lugar idóneo para la instalación de oficinas municipales, como también es el edificio del Mercado de Mariscos, e incluso la Terminal de Cruceros, inoperante desde hace varios años, por la falta de interés de las firmas navieras para incorporar el destino Guaymas en sus rutas.
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