Al margen de portar una fotografía en las placas que expide, el líder de una de las organizaciones “pafas” que operan en el Estado de Sonora, se aventó la puntada de expedir placas para que los discapacitados se puedan estacionar en áreas azules predeterminadas. 

Fidel Lugo Ayala es el dirigente “pafa” que no sólo es evasor fiscal, pues dichos organismos autoproclamados como únicas entidades que pueden regularizar vehículos de procedencia extranjera, cuyo proceso ya inició en Sonora, dio una muestra de su narcisismo, al imprimir su fotografía en los plásticos que expide, con costos que van de los 600 a los 700 pesos por unidad, con la promesa de la legalización. 

Se estima que sólo en Guaymas y Empalme, existen alrededor de doce mil unidades de este tipo, las cuales entrarán al proceso de regularización a dicho costo, ingresaron a sus arcas alrededor de 72 millones de pesos en los últimos años, de los cuales no han reportado nada al SAT, pues no están registrados bajo ningún régimen fiscal, al no expedir factura a los posesionarios que han registrado. 

Son alrededor de cuatro organismos del tipo los que han empadronado a más de doce mil posesionarios de vehículos extranjeros, sólo en esta región. 

De acuerdo con la Ley que ampara a discapacitados, toda persona de este tipo que quiera acceder a los cajones de estacionamiento exclusivos, deben someterse a un estudio de la Unidad Básica de Rehabilitación y luego de Tránsito Municipal a fin de expedir la licencia respectiva, por lo que los “pafas” están incurriendo en un fraude. 

Sólo ambas instancias, de común acuerdo, están facultadas para otorgar placas o permisos especiales, de acuerdo a la versión del mismo Departamento de Tránsito Municipal.