Si nos vamos a la estricta aplicación de la Ley, por año el puerto, concesionado a particulares y manejado por militares, estaría en condiciones de aportar cuotas tributarias por bastantes millones de pesos.
Para el ingeniero Ordaz Aguiar es un reto que deben enfrentar las nuevas autoridades que tomarán posesión en septiembre próximo, pues las actuales ni vieron ni escucharon, “porque es difícil enseñar a quienes lo saben todo, pero que campean en el mar de la corrupción, comenzando por Obras Públicas, que es un auténtico nido de ladrones.
“Yo pago mis impuestos, pero sin moches, lo que es, pero eso será el 17 de septiembre próximo por la mañana y así debemos obrar todos los guaymenses, si en realidad queremos hacer crecer esto, pero en esta administración no lo hemos hecho por falta de confianza, de que nuestros recursos, por obvias razones, se fueran a otros bolsillos”, indicó.
La mejor disposición para ir al rescate de nuestro deteriorado Centro Histórico, pues representan nuestro pasado, que la unión de los municipios conurbados de Guaymas y Empalme se conviertan en una realidad.
Desde esta perspectiva, en materia de pavimentación hay mucho por hacer, pero con compromiso y honestidad, se puede aplicar el cobro vía estacionómetros, pues ello implica el ingreso de recursos frescos.
Precisó que no quita el dedo del renglón en el propósito de lograr la conversión de la Comisaría de Ortiz en Pueblo Mágico, pues tiene pasado y presente, con un rico historial que muchos desconocen, con los suficientes atractivos para ser un detonador de la industria turística.