El caso del niño mordido por un pitbull es la punta del iceberg en un problema de salud pública de grandes dimensiones en el que el gobierno se ve atrapado entre las exigencias de la gente y los grupos animalistas.

El movimiento mundial de protección a animales ha logrado avances importantes en concientización de la sociedad a grado tal que de pronto pudiera dejarse en segundo término el sentido humanista que debe prevalecer en toda comunidad civilizada. Hay dos ejemplos claros que muestran la diferencia de criterios a la hora de aplicar la Ley contra el Maltrato de Animales, un caso surgió a partir de las lesiones en un perro que fue arrastrado por el conductor de un vehículo que no se percató de que alguien ató al animal en la defensa.

Frente a la secundaria de Guaymas norte vecinos estudiantes y maestros esperan a la comisión de salud para atender riesgo por contaminación y ediles nomás no se aparecen.