Si dicen que la historia de los pueblos está en los panteones, esto se ajusta a la medida en la necropsia de San José de Guaymas, ubicada sobre el Libramiento San José-San Judas Tadeo, que debe tener más de 200 años, si la fundación del pueblo data de principios mil 700.
Por casi 20 años, el añejo panteón se mantuvo en la penumbra, hasta que se construyó el libramiento y entonces quedó a la vista de los automovilistas.
Un panteón limpio, con vigilancia, agua en abundancia, venta de flores y productos alimenticios, fue lo que se observó ayer, en la Celebración del Día de los Fieles Difuntos.
Este es un lugar histórico, tanto por su antigüedad, como por los personajes que aquí yacen y que dieron origen a Guaymas, fungiendo como cabecera municipal, luego comisaría y actualmente, delegación.
No están aquí los pioneros de San José de Guaymas, pues hubo un primer panteón, a unos 300 metros de la iglesia, camino de terracería a Empalme, en el sector conocido como La Mezquitera, pero el actual, mínimo tiene 200 años, aunque los cronistas de la Ciudad no han encontrado coincidencias sobre su fundación.
Lo cierto es que aquí están en descanso eterno los originarios, algunos yaquis, chinos y franceses, entre otros, pero pocos, muy pocos de la ciudad de Guaymas, pues es un panteón para casi el uso exclusivo de sus residentes y del valle regional.
Tampoco hubo aglomeraciones; poca afluencia por la mañana y regular en el transcurso, pues se trata de un lugar pequeño, pero de mucha historia.