Primero está el morenismo seguro de repetir triunfos en el 24, con tal fortaleza que se pronosticarían candidaturas sin coaliciones ni acuerdos con otro instituto pero es evidente que su división interna e inexperiencia los obliga a compartir posiciones para continuar en el poder local considerando que en el 2021 batallaron para ganar la presidencia municipal.

Luego está el Verde que ha participado en las alianzas recientes solo que ahora su presencia incomoda más a la gente de izquierda debido a la importancia que le dan a ese partido cuando en el pasado proceso electoral fueron más bien relleno y se jugaron solos la presidencia municipal con muy pero muy pocos votos apenas suficientes para una regiduría.

El rumor más fuerte es la unión de estas dos fuerzas con miras hacia el 2024, Morena con la fuerza de Amlo y el verde como oferta para detractores o indecisos que pudieran irse a alternativas como Movimiento Ciudadano.

Aparte, la alianza reduciría opciones del partido más incómodo en la coalición que es el PT, de donde emanaron figuras con las que hoy no hay gran empatía, que también representan al proyecto de Nación y al quedarse fuera de los principales acuerdos no tendría más que aceptar lo que le den después de obtener resultados regulares en la elección anterior donde el municipio con más votos fue Guaymas.

Así Morena se quedaría con todo el poder de la izquierda, sin perfiles de riesgo dentro de su proyecto, eliminaría a personajes no gratos para la 4T en la región y además sumaría con el Verde a operadores políticos útiles en un proceso por la presidencia de la República para asegurar victorias contundentes con gente que sabe de política y le apuesta a ganar y tener un buen gobierno.