A una década de su creación, el organismo ha perdido más de la mitad del presupuesto para promoción debido a los resultados limitados por la falta de visión, proyección y desarrollo en un destino donde hace tanta falta apoyo a prestadores de servicios.

En el país las Oficinas de Convenciones y Visitantes se han creado como organismos público-privados enfocados al turismo de reuniones o negocios, aunque no exclusivamente, cuya labor principal es la promoción del destino además de otras funciones como la del desarrollo de productos turísticos y la capacitación a prestadores de servicios.

En la región Guaymas San Carlos, la OCV nació en el sexenio de Guillermo Padrés como parte del proyecto para construir un centro de convenciones que nunca se consolidó, en aquel entonces se creía que el organismo serviría de respaldo e impulso del sector pero con los años se redujo a ser un módulo de información turística al servicio de unos cuantos a tal grado que la mayoría de los prestadores de servicios acuden a la OCV de Cajeme para procurar capacitación y apoyo de promoción porque la de San Carlos solo ha tenido alcance para promover lo que conviene al grupo de desarrolladores que la secuestró durante la década de operaciones y en últimas fechas quedó en un mero escaparate político.

Esa fue la razón por la cual se quedó sin parte del presupuesto y se sostiene solo porque algunos turisteros quieren mantenerla, pero sin ser útil para quienes trabajan en el sector turismo que hoy en día se han quedado huérfanos de liderazgos.

Ellas y ellos pudieran tomar el ejemplo de otros destinos cuyos prestadores de servicios se organizaron para constituir consejos no lucrativos con una agenda representativa de los intereses de todos, desde el hoteleros, dueños o dueñas de restaurantes, yates, agencias de viajes, vendedores de artesanías, artistas y todos los que dependen y tienen depositado su patrimonio en los visitantes y que por ello necesitan de promoción, capacitación y apoyo.

Si lo consideran lograrían organizarse para empezar una etapa distinta en San Carlos para tener alternativas de crecimiento, buscar otros mercados y desarrollar el polo turístico con unidad y visión de futuro.