Desde un principio el incidente alcanzó notoriedad estatal por la brutalidad de la embestida y la mala decisión del responsable de abandonar a sus víctimas que fueron hospitalizadas y hoy se encuentran estables.

La fiscalía encontró el carro y supo que el joven conductor cruzó la frontera a Estados Unidos donde se ha activado ficha para su búsqueda y localización, pero fue más allá al investigar a los padres del ahora prófugo de la justicia.

En una acción legal que poco se promueve, la fiscal Claudia Indira Contreras solicitó órdenes de aprehensión en contra del padre y la madre de Nathan Karim “N”, y un juez penal las otorgó para el cumplimiento de elementos AMIC que detuvieron a Gabriela “ y Sergio Alberto padre y madre del probable responsable de lesiones en las familias.

El delito por el que se ejecutaron las órdenes es, por encubrimiento, que es entendido como la forma irregular de alterar, obstruir o manipular de cualquier forma los vestigios, huellas, rastros o fragmentos que se encuentren en el lugar en que se hubiere perpetrado un delito o que fuera resultado de la comisión de este.
La investigación por el delito de encubrimiento está en proceso y será el juzgado quien deslinde responsabilidades en un caso que como se dijo, ha dejado grandes lecciones porque qué no hace un padre o una madre por proteger a sus retoños ante un riesgo como el de ir a prisión incluso cuando se sabe que hay culpa.

Pero como lo dejó claro la fiscal una cosa es abstenerse de declarar incriminando a un familiar cercano, y otra muy diferente, obstruir deliberadamente la investigación y la acción de la justicia en perjuicio de una familia y de la sociedad.