De inicio, el hecho violento trastocó a las corporaciones policiales responsables de la prevención del delito y despertó cuestionamientos válidos en torno al empoderamiento de delincuentes que ponen en riesgo a gente decente y apreciada en la comunidad.
Esas mismas voces han reconocido ahora la rápido actuación de las autoridades con un operativo limpio en el que lograron el rescate de la víctima y la ubicación del autor intelectual que se encontraba en un penal de Sonora y ha sido trasladado a otro reclusorio de alta seguridad.
Ahora, tanto el profesionista como su familia se encuentran en un proceso de acompañamiento emocional a través del Centro de Atención a Víctimas del Delito que brindará apoyo psicológico y asesoría legal como parte del trabajo de resguardo en este tipo de casos que por su delicadeza ameritan toda la atención a quienes sufren por secuestradores.
Con esa labor la fiscalía y el sistema dio seguridad en general da muestra de eficacia y compromiso con los sonorenses para enviar un mensaje de cero tolerancia a delincuentes y marca un precedente que sí va a incidir en la estadística porque habla de combate a criminales pero también de lucha contra la impunidad. Lo que sigue es continuar con el fortalecimiento de las instituciones y la estrategia de seguridad que debe reflejarse en las calles y colonias de Guaymas y Empalme para recuperar la paz y dar garantías a familias de poder vivir sin miedo.