En un año y cuatro meses de gestión, por la administración de la Comisión Estatal del Agua han pasado dos jefes en Guaymas Empalme y ninguno pudo resolver la problemática en la red de drenaje y agua potable ni tampoco lograron estabilizar la relación con los dos sindicatos para despertar la molestia en miles de usuarios.

El caso de David Pintor fue uno de los tantos conflictos de José Luis Jardines en el organismo al confrontarse de manera directa con el síndico desde su llegada.

En ese momento se dijo que las diferencias estaban asociadas con dinero y con decisiones que provocaron un pleito tal que terminaron por romper. Guaymas y Empalme fueron castigados por varios meses por un recorte en el subsidio, el retraso en obras y todo para ejercer presión en un Pintor mesurado que se vio obligado a regresar a Palacio Municipal al darse cuenta que no había condiciones para hacer un trabajo digno dentro de la dependencia estatal.

No pudo dar resultados y en su lugar llegó Ricardo Montoya, gente cercana al ex vocal ejecutivo razón por la cual se pensó que con el cambio habría más apoyo para la región, pero fue todo lo contrario, hubo menos dinero, menos material y menos respuestas a pesar de que se nombraron a perfiles con conocimiento en las áreas.

Total, que la CEA vivió la peor de sus crisis y es ahí cuando se dio la salida de José Luis Jardines para motivar ajustes urgentes en la estructura del organismo empezando por el jefe de quien se dice dejará el cargo este mismo mes.

Todavía no han decidido quién será el o la administradora, se sabe que hay aspirantes y una lista de gente con experiencia de la cual va a surgir el nuevo funcionario que debe ser muy eficaz porque no tiene tiempo para aprender y encontrará una serie de problemas en abasto de agua y desorden.

En ese panorama, el gobierno no se puede dar el lujo de escoger a políticos ni a amigos, más vale que sea una persona profesional, técnico y operativo quien tome las riendas de la CEA para rescatar a los municipios de Guaymas y Empalme de esta emergencia sanitaria que afecta y pone en riesgo a los usuarios.