Así nació Salva una iniciativa a través de la cual la Secretaría de Seguridad involucró a dependencias de los tres niveles en colaboración con sectores de la sociedad dentro de un esfuerzo que va más allá de un protocolo policial, pues incluye atención integral para víctimas.
A un año de la decisión tomada por el Gobernador e implementada por la secretaria de Seguridad, María Dolores del Río Sánchez, más de 200 mujeres fueron atendidas por violencia familiar como parte del logro de sensibilizar a miembros de instituciones de atención a emergencias que ahora se han sumado a las acciones del Gobierno del Estado.
Para que el programa tuviera éxito se partió de la necesidad de mejorar la atención desde los reportes al 911 para apoyar a mujeres no solo al momento de la agresión sino con un acompañamiento integral.
Ahora, elementos de corporaciones policiales saben que deben detener al agresor en el momento y tienen que dar una respuesta al tener contacto con la víctima. Así la Secretaría de Seguridad Pública capacitó en ese rubro a mil 325 policías estatales, 3 mil 294 agentes municipales, 145 agentes investigadores y ministerios públicos.
Además, se involucró a mil 299 comercios, escuelas, oficinas de gobierno para que se convirtiera en Zona Salva de protección a mujeres víctimas de violencia.
Como parte de la misma estrategia, la Secretaría implementó el Código Violeta que busca acompañar a víctima con la participación de diferentes instituciones.
En 2022, se han recibido más de 22 mil llamadas al 911 de violencia familiar.
La Secretaría ha brindado 731 servicios de acompañamiento con asesoría legal y apoyo psicológico.
A través del 911 se activó en mil 313 ocasiones el Código Violeta con llamadas que fueron atendidas de inmediato.
En materia de prevención, se han ofrecido 2 mil 589 pláticas en escuelas y colonias sobre violencia familiar. Y aún con esos resultados todavía falta mucho por hacer en materia de conciencia y prevención, pero el primer paso está dado, ya se cuenta con un sistema sólido de apoyo al que las mujeres violentadas pueden recurrir para recibir apoyo con la certeza de que tendrán mejor atención y seguridad.